martes, 29 de septiembre de 2015

Ronda, entre los mejores destinos para viajar del mundo, según Trivago

La promoción internacional de un destino siempre es una magnífica noticia. La industria turística, que es el principal motor económico de Ronda, tiene a su favor nuestras señas culturales, medioambientales, patrimoniales y artísticas; las cuales, convergen en perfecta armonía con la prestación de un servicio puntero y de excelencia: Gracias a todos los que con su trabajo y esfuerzo contribuyen a hacer de Ronda un destino único. 
A la Administración Local le corresponde velar por la conservación de nuestro rico patrimonio, propiciar el escenario adecuado para fortalecer la marca Ronda y garantizar la estabilidad que nos permita  ser una herramienta útil en la consecución de los objetivos deseados.

domingo, 27 de septiembre de 2015

27-S

El PSC cae en 4 escaños, pero resiste la escisión y se mantiene como tercera fuerza en Cataluña. Una buena campaña con un posicionamiento claro, han sido vitales para desterrar los pronósticos iniciales. 

Aquellos que planteaban estas elecciones como un plebiscito, han perdido su principal base argumentar para continuar con la aventura separatista. 

La investidura de Mas como Presidente se antoja compleja  en un arco parlamentario muy fragmentado. Esperemos al desarrollo de unos acontecimientos que se prevén, como poco, interesantes. 

Desde aquí, mi enhorabuena  a los socialistas   catalanes y a Miquel Iceta particularmente.

Hitchcock y Higsmith

Cuando Hitchcock no rodaba, su vida se centraba en comer y beber. Al inicio de 1949, el afamado Director no tenía ningún proyecto esperándole y su generosa figura tomaba posiciones preocupantes. Concluía “Pánico en escena”, filme que no fue bien acogido por crítica y público, lo que le hizo montar en cólera y afirmar que jamás volvería a rodar thrillers humorísticos. Paralelamente a este hecho, Alfred Hitchcock se encontraba inmerso en la lectura de la novela “ Extraños en un tren” de la novata escritora Patricia Higsmith. Su instinto le advertía que estaba frente a un material excelente para un nuevo guión y enseguida llamó a sus agentes para que adquirieran los derechos del libro, con una peculiaridad: Nadie debía saber que detrás de la compra estaba el nombre de Hitchcock. De esta manera, pudo rubricar un contrato por solo 7.500 dólares; cifra que enfadó, y mucho, a Patricia Higsmith cuando supo de quién se trataba: Hitchcock ya tenía el argumento para su siguiente trabajo.