María Paz no tiene quien le escriba.

Durante estos días, hemos asistido a lo que parece ser el amago de una penosa estrategia, por parte de la derecha rondeña ( ese PP que se sienta en los Plenos, y del que poco más se sabe). Todo apunta a un objetivo: desprestigiar el liderazgo de Teresa Valdenebro. Para ello se arman de argumentos que bien podrían ser escritos por la trinchera enemiga o, dicho en otros términos, por una pluma poco dada al interesante juego del ajedrez. Digo lo de “trinchera enemiga” por varios motivos: El primero, y creo el más importante, pasa por intentar ridiculizar al adversario. Señora Fernández y compañía: para jugar en esos términos hay que contar con dos cuestiones de la que usted y los suyos están algo carentes: inteligencia y cierta clase. El hecho contrario, que es su caso, hace que sus chascarrillos suenen a formatos poco serios y de sobremesa. Cuestión poco aconsejable para la “autoridad” que usted dice representar. Dicen que el PSOE de Ronda tiene como portavoz a alguien que ocupaba el número catorce en las pasadas elecciones municipales. ¿Creen ustedes que eso es un problema? ¿De verdad lo creen? Para mi, particularmente, el dilema no es que el número catorce de una lista pueda ejercer como portavoz de un Grupo Político; eso indica nivel. El problema pasa porque la que concurrió de número uno a la Alcaldía de Ronda esté demostrando no servir ni para la suplencia de la peor lista posible. He ahí la cuestión, señores míos. ¿Cómo pueden creer que la falta de gestión que están demostrando día a día, se oculta diciendo que es la oposición la que no trabaja? A esto le llamo faltar el respeto a la ciudadanía y a su inteligencia. Desconozco quién está detrás de tan “brillante” juego político, pero, desde aquí, le pido que no muera en el intento de su noble ejercicio; que continúe marcando el paso de la derecha rondeña por mucho tiempo; y cuando decida mostrarse ante los ojos de todos y todas, reclamemos para este genio del ajedrez, una calle o una plaza con su nombre; y es que, nadie está haciendo tanto por el avance de sus adversarios políticos. Pienso que en el fondo, este escribiente ha asumido, antes que los suyos, que Ronda solo avanzará por la izquierda; desde el progreso; con otras políticas distintas. Y sin saberlo, se ha puesto al servicio de la causa. Por lo demás, todo sigue igual de parado en esta ominosa legislatura.